lunes, 14 de febrero de 2022

Procuradores



Para entender rápidamente la falta de equidad y proporcionalidad del sistema electoral vigente basta detenerse en dos cifras correspondientes a las recién celebradas elecciones de procuradores a Cortes en la Comunidad Autónoma de Castilla y León: a Unidas Podemos obtener un procurador le ha costado 60.000 votos, a Soria Ya obtener tres procuradores le ha costado 18.000 votos; dicho de otra manera: a Unidas Podemos un procurador le ha costado 60.000 votos y a Soria Ya cada uno de los suyos 6.000, DIEZ  veces menos que a Unidas Podemos; o de otra: Unidas Podemos más que triplica el numero de votos de Soria Ya, pero obtiene a cambio un tercio de sus procuradores.

Y esa falta de proporcionalidad y equidad -pensada sin disimulo para favorecer de origen la estabilidad política, o sea, el bipartidismo- no es debida principalmente al procedimiento de reparto de escaños (sistema d'Hont) si no a la consideración de las provincias como circunscripción electoral, aunque realmente se trate de la elección de procuradores a las Cortes de Castilla y León, es decir, al conjunto de las nueve provincias que integran esa Comunidad Autónoma (lo mismo que ocurre en las elecciones al Congreso de los Diputados en las elecciones generales a nivel estatal).

Por si alguien había olvidado el porqué de que PP y PSOE sean tan reacios al cambio de un sistema electoral tan evidentemente falto de representatividad democrática (con independencia de otras consideraciones, también importantes); cambio que sería tan sencillo como establecer como circunscripción electoral única el ámbito de las elecciones de que se trate en cada caso, que en éste hubiera sido la Comunidad Autónoma de Castilla y León (*). Que cada uno saque sus propias conclusiones en base a las cifras expuestas.

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(*)  Los resultados serían (considerando Castilla y León una circunscripción única y utilizando el mismo sistema D'Hont en el reparto de escaños): 

PP          28 (-3)         (13.363 votos por procurador)

PSOE     26 (-2)        (13.762 votos por procurador)

VOX        15 (+2)        (13.972 votos por procurador)

UP            4 (+3)         (13.792 votos por procurador)

Cs             4 (+3)         (13.364 votos por procurador)

UPL         3 (=)         (16.750 votos por procurador)

SY            1 (-2)         (18.390 votos por procurador)

Ni XAV, ni el resto de agrupaciones políticas habrían obtenido ningún procurador; es cierto que se penalizan ligeramente -pero mucho menos que la falta de proporcionalidad  resultante de mantener la circunscripción provincial- los votos concentrados en una sola provincia. Es fácil que los problemas prácticos a la hora de plantear pactos de gobernabilidad resultaran siendo los mismos que actualmente, pero la representatividad democrática en procuradores se ajustaría mucho más aproximadamente a los votos obtenidos. A la vista de estos datos se entiende mejor que ni PSOE ni PP tengan mayor interés por modificar un sistema que les favorece tal como está.

martes, 8 de febrero de 2022

Reciclando

Aprovechando que -según creo recordar- el duquesado de Palma está vacante al ser desposeído del mismo su anterior titular, Iñaki Urdangarín -que, por cierto, tampoco mostraba mucho aprecio por él, el título sólo le servía para hacer chistes obscenos- podría la borbonidad reinante adjudicárselo a Rafael Nadal, para el que algunos reclaman actualmente un título nobiliario, ¿quién con mayores méritos y residiendo -físicamente, y parece que ahora también fiscalmente- en Palma de Mallorca?

No estoy entre quienes secundan la propuesta, y eso desde antes de saber que el que los españoles conozcamos los triunfos tenísticos mundiales de Rafael Nadal nos cuesta a los todos los españoles, aficionados o no al tenis -los paga la televisión pública- la graciosa cifra de un millon de euros por la primicia de sus logros (aparte, al parecer,  del dinero que se le paga a Nadal, aproximadamente medio millón de euros por temporada), por considerar que, con parte de ese dinero bien podría Nadal comprarse un título nobiliario de su gusto, tal que aquí. (Para aquellos  que sean propensos a ese tipo de vanidad, parece que pueden comprarse títulos nobiliarios por menos de 30 euros).

Aquí, ya digo, podríamos hacer evidente nuestro compromiso con la lucha contra el cambio climático reciclando títulos nobiliarios en el estado de conservación de usado pero aceptable (no como otros).

jueves, 3 de febrero de 2022

Querencia

Creo que así como hoy podemos explicar toda  la vida que conocemos en base a los cuatro componentes o nucleótidos (A, T, C, G)  que conforman el ADN y el ARN, igualmente puede explicarse la historia, en base a unos pocos dilemas (amor-odio, empatía-egoísmo, etc.) que conforman la esencia del ser humano como ser social; no sé si también cuatro, pero no serán muchos los componentes esenciales; eso hace que entendamos tan bien a personajes históricos de hace cientos de años como si fueran actuales. Igualmente y a semejanza de la disposición helicoidal de esos cuatro eslabones básicos que constituyen las cadenas de la vida -y que también se muestra en la disposición y secuencia de las notas musicales- la historia viene a ser una repetición con variaciones de una espiral en el tiempo; si hacemos caso a Marx la historia se repite dos veces: la primera como tragedia, la segunda como farsa, pero yo creo que más bien se trata siempre de la misma tragicomedia reencarnada con reiteración budista.

Por ejemplo, si nos fijamos en este país, podemos ver que las semejanzas de su situación política actual con la de hace exactamente un siglo son algo más que casuales: estamos a final de  una etapa (1975- ) conformada por una segunda restauración borbónica que parece calcada de la primera (1874-1931). Aquella se basaba en una aparente democracia representada por dos partidos supuestamente representantes de la izquierda y la derecha: liberales y conservadores; el mismo papel reservado a PSOE y PP en la actual. Y es sabido que éstos vivían felices en su turnismo; tanto que a ambos se les trasluce el deseo perpetuo de volver a tiempos tan gustosos para ellos.

No pudo el PSOE, tras dos elecciones consecutivas en 2019 volver a esos tiempos felices y hubo de formar un gobierno de coalición con Unidas Podemos pero, a la que puede -querer siempre quiere- intenta volver a ellos o, en su defecto, a una geometría variable que le permitiera perpetuar el bipartidismo aún en su forma imperfecta (o sea, coexistiendo con más partidos). No de otra forma puede leerse el actual deseo del PSOE de lograr el acuerdo con partidos de la derecha para llevar a cabo sus políticas en contra de los deseos e intereses de sus actuales socios de gobierno. Pero no se puede estar en misa y repicando: o bien socios de gobierno para acordar y cumplir un programa que cubra objetivos comunes o bien geometría variable para pactar bilateral y alternativamente con unos y otros. 

Iba yo a tener razón cuando dije aquello de que contra la querencia no vale la ciencia (Querencia: inclinación o tendencia de las personas y de ciertos animales a volver al sitio en que se han criado o tienen costumbre de acudir).

Sólo recordar que si esta Restauración 2.0 sigue la cronología de la primera con un siglo exacto de demora, para 2023 tendremos dictadura y para 2031 República. Que no sé si desear o temer tanta exactitud.