He aplicado este procedimiento -algo taumatúrgico y paranormal, sí- a la palabra normal y al concepto asociado: normalidad, muy en uso actualmente a causa de un nuevo eufemismo -con cierto tufillo a oxímoron- como es la nueva normalidad, esa normalidad que se supone que configurará el mundo post-Covid19. Pues bien, además de los consabidos significados de normal -usual, habitual, natural- normal también significa en geometría perpendicular, es decir, líneas o planos que forman un ángulo recto respecto a otras líneas o planos; ahora toca buscar recto: justo, severo, primitivo, literal, que no se inclina ni hace curvas... ¿primitivo?...¿lotería primitiva?: juego público de azar en el que de un bombo...ya basta, en unos pocos saltos (normal-perpendicular-recto-primitivo(a)-lotería) he conseguido la clave: la nueva normalidad será como la normalidad anterior, es decir, una lotería en la que la inmensa mayoría continuaremos perdiendo el dinero alimentando la ilusión de hacernos ricos de forma instantánea (suponiendo, además, que ello nos hará más felices el resto de nuestra vida). Vamos, que a lo de nueva normalidad yo le quitaría el prenombre; la nueva normalidad será una normalidad como la de siempre (o puede que más precaria), normalidad de ir tirando, que es lo que parece que todos añoramos. Y, a lo que se ve, siguen siendo pocos los que interpretan y asumen las señales de que esa normalidad tan añorada nos está encaminando -a todos- inexorablemente al desastre.
Probaré con la palabra ilusión que, a pesar de la primera definición -concepto, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos- parece más prometedora.
No hay comentarios :
Publicar un comentario