miércoles, 23 de noviembre de 2016

Hipocresía

No es ningún descubrimiento, más bien un recordatorio: en éste país se mejora muchísimo al abandonar el escenario, quiero decir al morir; es una tradición muy de aquí. Será por eso que andan muy revolucionados en el PP por la falta de respeto para con la fallecida Rita Barberá -casualmente, los mismos que hace pocos días procuraban evitarla por todos los medios para ni siquiera salir con ella en una foto- de quienes no han permanecido en el hemiciclo del Congreso de los Diputados para guardar un minuto de silencio en su memoria.
Conviene en todo caso tener, efectivamente, la necesaria memoria para recordar que el grupo parlamentario del PP se opuso a guardar igualmente un minuto de silencio tras el fallecimiento de José Antonio Labordeta alegando que nunca se había hecho antes y pese a que Labordeta sí había sido diputado  del Congreso y no senador, como ha sido el caso de Rita Barberá. Por no recordar, también, cuando ella misma se burló de la memoria de las víctimas del accidente del Metro de Valencia ante los manifestantes de la Intifalla en Marzo de 2015. Es lo malo de padecer memoria selectiva -seguramente por sobrecorrección de disonancias cognitivas- que al mirar atrás sólo con un sólo ojo el otro se vuelve vago y hacerse el tuerto con frecuencia puede acabar con la capacidad  de poder ver la realidad como es, en profundidad.
Respecto a los representantes del PP mencionados al principio, esos panegiristas que para dentro de nada estarán proponiendo la canonización de Rita de Valencia (tendrán que empezar por rezar pidéndoselo a su propia santa, Rita de Casia, patrona de los imposibles, aunque, por otra parte, parece que sólo se requieren dos milagros -con los innumerables que se le atribuyen en el PP-, y sólo uno si se es mártir) pocas veces he visto personificados tan inequívocamente  los pasajes de Mateo 23:27 y 23:28: ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda suciedad. Así también vosotros, por fuera parecéis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de iniquidad. Y podría citar bastantes nombres propios en el PP como practicantes habituales de la magnífica hipocresía que define Edmund Burke, de esa que no tiene ninguna intención de cumplir las promesas que hace y que, por tanto, no cuesta nada; ya dijo antes Quevedo que  nadie ofrece tanto como el que no va a cumplir; por su actividad política como hombre de confianza del duque de Osuna sabía de qué hablaba e igualmente opinaba que la hipocresía, siendo pecado en lo moral, es grande virtud política.

jueves, 17 de noviembre de 2016

Cuento de Navidad

En la apertura -que es usual adjetivar de solemne, como de incomparables los marcos- de la XII Legislatura, ha comenzado el Jefe del Estado recordado el espíritu de la Transición, glosando aquella concordia, aquella generosidad y aquella responsabilidad -ya se sabe que las cosas buenas llegan siempre de tres en tres- que si bien nunca fueron tan así, le han venido bien como mensaje de reconocimiento al PSOE -y también, aunque en menor medida, a Ciudadanos- por facilitar el desbloqueo institucional que ha permitido finalmente la formación de gobierno por parte del PP. Ha insistido, por si alguien no lo entendía: creo que la crisis de gobernabilidad se ha resuelto con diálogo, con responsabilidad y con generosidad; que tanto ha insistido en lo de la generosidad y la fraternidad, que yo ya esperaba oír, de seguido, libertad e igualdad completando la tríada revolucionaria; se ha abstenido seguramente en recuerdo de algún ilustre antepasado Borbón.
Que bonito sería que una mínima parte de los bellos deseos expresados por el Jefe del Estado se hicieran efectivos realmente y no que acabara sonándonos todo a cuento de Navidad repetido -en realidad a cuento chino- con la entonación que de niños dábamos a los versos mal recitados.
Pero al finalizar su discurso, a éste Borbón se le veía encantado recibiendo los aplausos de sus señorías. Y es que seguramente han durado más de lo previsto para compensar la abstinencia efusiva de los miembros de algunos grupos parlamentarios. Pero, como decían en Expediente X: la verdad está ahí fuera; aún, como el dinosaurio de Monterroso.

Libertad religiosa

Dando por bueno el simplismo radical que supone afirmar que quien no está conmigo está contra mí, la fundación de la Santa Sede Ayuda a la Iglesia Necesitada, en su  Informe sobre Libertad Religiosa en el Mundo (2016) nos informa de que, en España, el crecimiento y auge de una izquierda mucho más radical y anticlerical, representada en Bildu, Compromís, las Mareas gallegas y las distintas marcas electorales de Podemos, los cuales acceden a ámbitos de poder que hasta ahora no habían tenido, permiten presagiar que la situación de la libertad religiosa en España pueda empeorar sustancialmente en los tiempos venideros. Tal cual.
Según el mismo informe, ese presagio se deduce de los Incidentes (denominados Ataques anticristianos en el informe) tales como la solicitud de retirada de imágenes religiosas de ámbitos públicos, discursos políticos alusivos a los supuestos privilegios y financiación ilegal de la Iglesia mediante exenciones de impuestos, mención de los numerosos casos de pederastia dentro del clero, declaraciones de intención sobre la supresión de enseñanzas confesionales en el ámbito de la educación pública, y donde -incluso- no faltan verdaderos incidentes, como puedan ser la quema de las puertas de dos iglesias (en Málaga y O Grove (Pontevedra)) o las manifestaciones de junio de 2014, cuando activistas del grupo feminista Femen con los pechos al aire se encadenaban en la catedral de la Almudena de Madrid, y el 20 de noviembre profanaban el cementerio de Paracuellos del Jarama (Madrid). Tampoco falta en el informe, en su apartado sobre el marco legal y su aplicación, y como menciones destacadas, la condena de 4320 euros a la concejala de Madrid, Rita Maestre, por profanar la capilla de la Universidad Complutense en marzo de 2011 (meses depués absuelta); o la de 12 años a los terroristas que pusieron una bomba en la basílica del Pilar en octubre de 2013.
Finaliza el informe asegurando que  en lo tocante a libertad religiosa en España, cabe hablar de un panorama de cierta intolerancia, muy focalizada en los ámbitos de lo que se da en llamar “la izquierda”, que recupera una vieja seña de identidad abandonada en los últimos tiempos cual es el la del anticlericalismo, disfrazada bajo términos como “laicismo”, “separación Iglesia-Estado”. O sea, que defender esto último, que supone uno de los fundamentos de un Estado moderno desde la Revolución Francesa acá, es disfrazar el anticlericalismo. Que si por la Iglesia católica fuera, volveríamos al Estado teocrático, supongo.  
En todo caso, parece conveniente recordar que la libertad de culto o libertad religiosa es un derecho fundamental que se refiere a la opción de cada ser humano de elegir libremente su religión, de no elegir ninguna, o de no creer o validar la existencia de un Dios y ejercer dicha creencia públicamente, sin ser víctima de opresión, discriminación o intento de cambiarla a la fuerza. Y del propio informe lo que en realidad puede deducirse con claridad es que la única libertad religiosa que realmente peligra en España es la de los no católicos (*). Según Azaña, la libertad -también la religiosa- no hace ni más ni menos felices a los hombres; los hace, sencillamente, hombres. Está más que claro que la Iglesia católica no estuvo -ni está- de acuerdo con él; antes que personas (hombres y mujeres) quiere fieles: apacentar un rebaño de dóciles borregos.

__________________________________________
(*) Según la nota aclaratoria [Fuentes-2] del mencionado informe, Ateos, agnósticos, musulmanes y los judíos no superan los 15000. Ignoro que fuentes hayan permitido estimar ese total tan manifiestamente escaso e irreal y como ese dato puede concordar con el 30,7% de no-cristianos admitido al comienzo del informe.

martes, 8 de noviembre de 2016

Lo normal

Ya casi agotado el barro del charco en el asunto del piso que Ramón Espinar vendió en 2010 (aunque en El Mundo han añadido un poco de agua para poder informarnos de que en fechas próximas a la venta, Espinar se manifestaba bajo el lema Sin casa, sin curro, sin pensión, sin miedo; parecen insinuar que vendió la vivienda por el gusto de poder manifestarse), y visto que es gratis y además entretiene bastante al personal, ahora le ha tocado el turno a ... otro dirigente de Podemos; casualidades que ocurren.
Y es que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha manifestado en una entrevista televisada su extrañeza porque Pablo Iglesias viva en un piso de protección oficial en Vallecas -propiedad de un familiar- a pesar de su nivel de ingresos, y ha recordado que este tipo de viviendas están pensadas para personas con determinadas necesidades económicas. La señora Cifuentes ha insistido en que no le parece normal  que una persona en situación económica tan desahogada ocupe una vivienda protegida que nace con otros fines. 
Pero, sin duda, a la señora Cifuentes le debe parecer muy normal que Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y diputado del PP por Sevilla, se haya embolsado durante las pasadas legislaturas 1.823,86 euros mensuales del Congreso de los Diputados en dietas de alojamiento y manutención -a añadir a su salario salario oficial, de 64.053,79 euros anuales- pese a que tiene tres pisos en propiedad en Madrid. O que ninguno de los 10 miembros del Gobierno del PP que han ocupado escaño en el Congreso -incluído Mariano Rajoy, que tenía la vivienda asegurada y costeada con dinero público- ni el propio Montoro, hayan renunciado a cobrar ese complemento por alojamiento y manutención.
Por eso eres escritor -concluye Roberto- porque las cosas raras te parecen normales y las normales, raras, escribe Juan José Millás en su novela La mujer loca, cuya protagonista es Julia, una joven que trabaja en una pescadería; menos mal: no coincide ni el nombre, ni la edad ni la profesión para poder achacar a Millás poderes premonitorios. Aunque lo de verdad tiene nerviosa a Cristina Cifuentes es que se le acabe el bacalao que seguir partiendo. Si eso ocurriera, que se dedique a escribir: según el Roberto de la novela de Millás tiene dotes; es fácil suponer que no le saliera nada con la magia del propio Millás, pero oye, insistiendo, insistiendo...y ella es muy de insistir: lleva en el PP desde cuando ni se llamaba así, pero mira los frutos de su persistencia: presidenta de la Comunidad de Madrid.

sábado, 5 de noviembre de 2016

El guiñol: Epílogo (*)

No es infrecuente que en los guiñoles acabe ganando el malo, lo cual provoca que los niños más sensibles terminen llorando y el resto quede con cara de pasmo: así nos hemos quedado muchos españoles, con la boca abierta y alguna que otra lágrima entre los votantes del PSOE, sobre todo; aunque era previsible: las muertes anunciadas acaban con difunto a los postres (Pedro Sánchez, en éste caso).
Bueno, pues ya tenemos gobierno -aproximadamente el mismo que hemos tenido en funciones el último año y de forma efectiva en los cuatro años anteriores- y el señor Rajoy de tan asumido que tiene el esquema bipartidista -tan gustoso para él- de forma simultánea al nombramiento de ministros, también ha decidido nombrar a la oposición, a quien ha de desempeñar el papel malo oficial -el PSOE- en las próximas escenas del guiñol que piensa seguir representando. Eso sí, un PSOE ya convenientemente descabezado, que dá menos trabajo un títere con menos hilos (y también, porqué no, por darle ese capricho a quien ha facilitado su investidura como presidente). Y en la actual gestora del PSOE, tan contentos fantaseando con ser una oposición entre firme y dura, sin tener en en cuenta que en nuestro sistema parlamentario no existe como tal el puesto de jefe de la oposición ni es de aplicación el sistema Westminster usado por los británicos y que, si descontáramos los votos de los quince parlamentarios que votaron NO en la investidura de Mariano Rajoy, el PSOE no es el partido que cuenta con mayor representación parlamentaria sin estar en el gobierno, además de ser desconocido su candidato a ocupar la presidencia del Gobierno; el papel de líder de la oposición está vacante en su grupo parlamentario en la actualidad. En esa gestora desean que Pedro Sánchez sea como Bruce Willis en El sexto sentido, muerto sin saberlo, pero no se dan cuenta que también el PSOE actual se asemeja bastante a los zombies de la Noche de los muertos vivientes. Y que como se empeñen en continuar representando ese papel, vamos a pasar de la cara de pasmo y las lágrimas a la risa nerviosa: no hay nada más fácil para conseguir una carcajada que el terror patético.
___________________________________________

(*) Escenas: I, II, III, IV, V, VI, VII, VIII, IX y X