viernes, 20 de noviembre de 2015

Precarización laboral

Resulta ahora que desde el FMI nunca pidieron moderación salarial para España -al señor Rajoy no se lo debieron decir tan claro- porque puede ser perjudicial: me descubro ante la sabiduría de los expertos del FMI;  sólo ellos podrían haber llegado a adivinar que un salario precario -que es lo que en realidad supone la moderación salarial- no sólo es perjudicial para el que lo sufre, si no que, además, perjudica al ciclo económico en general y al mercado del consumo interno en particular: los pobres -trabajen o no- no pueden comprar, sólo pueden pedir.
Pero que la moderación salarial perjudica a la economía en general y a su sacrosanto principio de la competitividad es también más que evidente; ninguna empresa es más eficiente únicamente abaratando los salarios -nadie trabaja más y mejor en peores condiciones- como ya quedó demostrado con los estudios de Saphiro y Stiglitz sobre el salario de eficiencia : https://es.wikipedia.org/wiki/Salario_de_eficiencia .
Un ejemplo: la Lavandería Hospitalaria Central de Madrid. Tras su privatización y la lucha de años de sus trabajadores contra las condiciones de precarización impuestas por la empresa que la explota, ahora conocemos que en las batas del personal sanitario de los hospitales de Madrid que utilizan los servicios de la Lavandería -y en el resto de la ropa de uso hospitalario- se han detectado, tras su lavado, hasta 80 tipos de bacterias; aproximadamente un tercio de la ropa de utilización en esos hospitales -sábanas, toallas, etc.- debe ser devuelta a la Lavandería por no estar en las exigibles condiciones higiénico-sanitarias. Imagino que ésto último no hace sino redondear el negocio de la empresa propietaria de la lavandería, pero del supuesto beneficio público derivado de una también supuesta mejor gestión privada ni rastro, todo lo contrario. Y es que es muy difícil de creer que un servicio público pueda mejorar tras descontar los beneficios que una empresa privada ha de embolsarse, beneficios que proceden, directamente, tanto de la precarización del empleo como de un deterioro evidente de la calidad de esos servicios. 

No hay comentarios :

Publicar un comentario