El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda lleva tiempo reiterando la existencia de alternativas reales a la política de recortes de servicios públicos y a la subida de impuestos, en concreto, la de abordar seriamente la lucha contra el fraude fiscal en este país; una postura que supondría una recaudación superior para el Estado que la que se pretende obtener sumando recortes y subida de impuestos. Por el contrario, el gobierno persiste en éstos y no sólo eso: aprueba una amnistía fiscal que supone una renuncia expresa a la lucha contra el fraude fiscal y que, en el mejor de los casos, supondrá para las arcas del Estado un 10% de lo defraudado. En resumen, con la subida de impuestos, en concreto el IVA -al margen de su evidente falta de equidad- es fácil que no se alcance la recaudación prevista debido a una previsible retracción del consumo y por otra parte se perdona "conponderadamente" el abultado fraude fiscal residente en el gran capital de bancos y grandes empresas. O sea, sumar ineficiencia a la ineficacia. Y esto es lo que, según el presidente del gobierno resulta "doloroso pero inevitable". Ignoro lo que a él le pueda doler dada su posición, pero si además admite su inevitabilidad ¿para que nos sirven él y su cargo?.
No hay comentarios :
Publicar un comentario