"La parte contratante de la primera parte...", así comenzaba un
delirante proyecto de contato en "Una noche en la ópera", de los
hermanos Marx. Recuerdo igualmente a los personajes de Cantinflas
meterse en enrevesados jardines de difícil o imposible salida tras largo
tiempo de divagación divagativa (que diría el propio Cantinflas). Pues
bien, ayer la secretaria general del PP, intentando explicar lo
inexplicable a cuenta del caso Bárcenas, nos ofreció gratis una muestra
de su vena claramente cómica a base de "simulaciones en diferido" y
otras perlas que, con seguridad, quedarán en la antología del disparate
político-administrativo-laboral. No suponía yo tales capacidades en la integrante de un cuerpo tan formal como el de abogados del Estado.
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